Estar en el hospital por cualquier período de tiempo no es algo que los adolescentes o cualquier otra persona elija. Pero estar en el hospital no tiene que significar estar aburrido todo el tiempo.
Éstos son algunos consejos para sacarle el máximo provecho a tu estancia:
- Hacer preguntas y hablar con la gente (con otros pacientes y la gente que labora en el hospital).
- Otros adolescentes en el hospital probablemente se sienten lo mismo que tú. Tener a alguien de tu edad para hablar, puede ayudar.
- Puedes ser sorprendido, por lo fácil que puede ser hacer amigos en el hospital. Compartir tus sentimientos con alguien que sabe lo que es permanecer en el hospital también puede ayudarte.
Los médicos y las enfermeras
¡Conoce a tu equipo de atención médica y no tengas miedo de hacerles preguntas! Estas personas incluyen a tus médicos o enfermeras, psicólogos o trabajadores sociales.
Hablar con tus médicos o enfermeras sobre cómo participar en tu propio cuidado es importante, ya que te motivarás para seguir adelante. La mayoría de las personas que se responsabilizan de su propio cuidado se sienten mejor consigo mismas por hacerlo.
Cosas para hacer
Averigua qué actividades están sucediendo dentro del hospital. Algunos hospitales ponen obras de teatro y tienen noches de cine. También pueden contar con un salón, zona sólo para los adolescentes.
Muchas habitaciones cuentan con red para poder ingresar a internet. Esta herramienta te ayudará a entretenerte y a pasar un momento agradable.
Investiga qué sucede fuera del hospital.
Mantente en contacto con tus familiares y amigos. El hecho de que estés en el hospital no significa que tenga que pierdas el contacto con las personas que te importan. Menciónales cuándo tienes permitido responder llamadas.
Pregunta qué opciones de alimentos tienes.
Puedes sorprenderte, muchas veces te consienten con lo que más te gusta. También muchas veces es permitido comer cosas que estén fuera del hospital. Si es así, infórmales a tus amigos y familiares que te lleven tu comida consentida.
No te quedes atrás en la escuela.
Pide tarea y cosas para hacer dentro del hospital, no pierdas conocimientos por estar en el hospital. Muchos hospitales tienen maestros para ayudarte con el trabajo escolar. También puede haber computadoras que puedes usar para investigar y hacer tareas.
Mantente ocupado todo el tiempo.
Lleva cosas divertidas de tu casa, por ejemplo tus propios libros, revistas, música, videojuegos portátiles, revistas, películas, puzzles o cualquier otra cosa que te interese. Puedes llevar cosas que te hagan sentir cómodo, como tu Vulpi de peluche, una almohada, una manta y fotos de tu casa. En lugar de usar batas de hospital todo el tiempo, usa tu propia pijama. El hospital también puede tener una biblioteca, una ludoteca o jardín, películas y juegos a los que puedes acceder. Investiga sobre esto.